Por Héctor Cantú
La Furia Roja volvió a mostrar músculo y se mantiene como líder de grupo
La Selección de España no tuvo contratiempo alguno para lograr su cuarta victoria en la Nations League, esta vez conseguida en casa ante Serbia con un contundente 3-0.
Para el equipo de Luis de la Fuente resultó en un auténtico día de campo que, incluso, pudo terminar con más goles en el tanteador.
Aymeric Laporte adelanta a España ante Serbia
La historia mágica en Córdoba comenzó muy temprano con el gol de Aymeric Laporte con el que España comenzó a tejer el camino hacia la victoria.
La Furia Roja no se equivocó en nada. Controló el ritmo del juego, la pelota y a su propio rival que nunca encontró la forma correcta de poder competirle a la actual campeona de Europa.
En la segunda mitad, Álvaro Morata, quien busca seguir subiendo posiciones en la clasificación de goleadores históricos de la Selección, falló un penal ante la crítica sonora de la afición.
La reivindicación de Álvaro Morata con su selección
Sin embargo, fue el propio jugador español quien marcó el 2-0 con un soberbio remate dentro del área que terminó por desarticular a la muralla serbia.
Una falta a las afueras del área terminó por hundir a los visitantes. El VAR determinó la expulsión del defensa Pavlovic y en esa misma jugada, con un cobro magistral de Álex Baena, España logró el 3-0 inamovible en el tanteador.
Este resultado deja a la Furia Roja como líder de su sector y con una diferencia de tres puntos de su más cercano perseguidor, Dinamarca, que empató ante Suiza en su cuarto compromiso de la Nations League.